Sangre de Cristo, derramada sobre la tierra durante su agonía, Sangre de Cristo, vertida en la flagelación. Sangre de Cristo, que emanó de la corona de espinas, Sangre de Cristo, derramada ...
creo que verdaderamente estás dentro de mí con tu Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad ... a cuya fiel custodia fueron encomendadas la misma inocencia, Cristo Jesús, y la Virgen de las vírgenes ...
Fue el primero que dudó de la resurrección de Cristo cuando supo del milagro, por lo que se lo conoce como Tomás, el incrédulo. Hoy, 21 de diciembre, se celebra su día en la Iglesia Católica.