El estiércol de elefante que contiene granos de café forma parte de un proceso para hacer el "Café Marfil Negro", en un campamento de elefantes en Chiang Rai, provincia en el norte de Tailandia.
Paula Bronstein/Getty Images Son las enzimas del estómago del elefante las que reducen las proteínas que provocan amargura habitual del café, dando paso a que la semilla adquiera un sabor más suave.